Darfur: Una década de conflicto

La organización humanitaria Oxfam ha señalado hoy que una década después que se iniciara el conflicto armado en la región de Darfur, en Sudán, los 3,4 millones de personas que aún precisan de ayuda humanitaria ven impotentes como la frágil situación de seguridad se deteriora aún más.

El aumento de los enfrentamientos durante los últimos meses, ligados a disputas por el control de la tierra y de los recursos minerales, pone en peligro el proceso de paz en Darfur.

Se estima que en el mes de enero 100.000 personas se vieron obligadas a desplazarse y 100 murieron debido a enfrentamientos entre las tribus rivales en Jebel Amr, en el norte del estado. Además, en los últimos días, 50 personas más han perdido la vida. Según Naciones Unidas, el número de personas desplazadas en los dos primeros meses de 2103 ya supera el número de desplazados en todo 2012.

Es necesario un esfuerzo local e internacional

En pleno desarrollo del proceso de paz, la comunidad internacional debe reiterar su compromiso con la paz en Sudán. Así, es necesario promover esfuerzos locales para lograr la paz y facilitar que la ayuda humanitaria llegue a los millones de personas que aún la necesitan.

"En Darfur aún hay 1,4 millones de personas desplazadas internamente que todavía no pueden regresar a sus casa de forma segura", señala El Fateh Osman, director de país de Oxfam en Sudán.

"A través de un renovado compromiso para lograr una paz justa, que incluya una mejor financiación y puesta en práctica de las disposiciones incluidas en el Documento de Doha para la Paz en Darfur (DDPD), el país y la región podrán comenzar a salir de esta larga crisis que ha provocado numerosas muertes y sufrimiento".

El Gobierno, con el apoyo de la misión de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas y de la Unión Africana (UNAMID), debe proteger a las personas frente a la violencia y garantizar que los desplazados puedan volver a sus casas de forma segura, si así lo desean. Quienes no deseen volver, incluso cuando se haya logrado la paz, no deben ser obligados a ello. 

La nueva realidad de Darfur

Una década después que se iniciara el conflicto, Darfur ha cambiado para siempre. Más urbanizado que antes, los campos cobijan a un gran número de personas que no puede volver a sus hogares en las zonas rurales. 

Esta realidad debe verse reflejada en las políticas del Gobierno y de los donantes. La ayuda humanitaria debe llegar a quienes más lo necesitan, en todo el país e, incluso, en aquellas áreas afectadas por el conflicto en los estados de Kordofán Sur y Nilo Azul. El Gobierno debe incrementar rápidamente sus esfuerzos para proporcionar servicios básicos a todas las personas.

"Este aniversario debe servir para despertar nuestras conciencias y acabar con el conflicto de una vez por todas. La comunidad ha estado 10 años intentando mitigar el impacto de la crisis. Ahora es momento de encontrar soluciones duraderas y ayudar a las personas de Darfur a reconstruir sus vidas y sus comunidades", afirma Osman.