El material de Oxfam llegará Ecuador en el avión con ayuda humanitaria de AECID

Ante el terremoto de 7,8 grados en la escala de Richter que sacudió la región noroeste de Ecuador el pasado sábado, Oxfam (Oxfam Intermón en España) ha empezado ya a realizar las primeras tareas para asegurar la atención en las poblaciones afectadas. 

Cuenta con un primer equipo sobre el terreno integrado por especialistas en logística y expertos en agua y saneamiento que están evaluando las necesidades de la población afectada. Además, se está preparando un primer envío de materiales para mantener la higiene y asegurar la distribución y potabilización del agua. Todo este material saldrá en las próximas horas en el envío que la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID) está preparando desde el aeropuerto de Torrejón de Ardoz.

El primer objetivo es tener un diagnóstico experto de los daños para ofrecer ayuda de la manera más efectiva a las comunidades afectadas por esta tragedia. La organización se coordinará con el Gobierno ecuatoriano para que sus acciones sean complementarias a aquellas que realizan los equipos oficiales.

Oxfam contribuirá a paliar esta emergencia especialmente facilitando el acceso al agua potable y contribuyendo al saneamiento para prevenir la propagación de enfermedades asociadas al consumo de agua en mal estado. 

Oxfam cuenta con más de 30 años de experiencia en Ecuador durante los cuales ha trabajado en la mejora de los ingresos, las condiciones de vida y el acceso al agua y a la tierra de las poblaciones dedicadas a la agricultura, y ha potenciado su participación como actores sociales relevantes ante políticas públicas que les afectan. También ha apoyado los movimientos que impulsan el reconocimiento de los derechos de las mujeres y luchan contra la violencia de género. Además, ha trabajado en la reducción de riesgos ante desastres conjuntamente con la Administración ecuatoriana. Asimismo, ha contribuido a mitigar otros desastres en el país como los daños causados por la erupción del volcán Tungurahua en 2008  o  las inundaciones que se produjeron ese mismo año en el país. En 2011, puso en marcha un sistema de alerta temprana ante tsunamis en los que participaron cientos de escolares.