Los países ricos que participan estos días en la Convención de la ONU sobre Cambio Climático en Bonn deben alcanzar compromisos más ambiciosos en la lucha contra el calentamiento global si se quiere llegar a un acuerdo efectivo en la Cumbre de Copenhague a finales de este año, donde se sustituirá el Protocolo de Kyoto y se marcarán las nuevas directrices mundiales para hacer frente al cambio climático.Esta es la opinión de Oxfam Internacional que considera “insuficiente” la intención de EEUU de dejar sus emisiones de carbono en 2020 a los mismos niveles de 1990, tal y como anunció esta semana Todd Stern, comisionado para el Clima de la administración de Barack Obama.“En lo referente a objetivos de emisión, los científicos piden mayor compromiso del que EEUU está poniendo sobre la mesa. Independientemente de la realidad política, los impactos que está causando el cambio climático -especialmente sobre los más pobres- deben ser prioritarios en las negociaciones”, señala José A. Hernández de Toro, portavoz de Intermón Oxfam (Oxfam en España) para Cambio Climático.No obstante, Oxfam califica de “buena noticia” que el representante de EEUU haya destacado en la Convención de Bonn la importancia de crear un fondo específico para la adaptación de los países pobres al cambio climático a través de un renovado régimen climático mundial.Oxfam considera imprescindible que los países ricos reduzcan sus emisiones en 2020 al menos en un 40% respecto a los niveles de 1990 y, al mismo tiempo, estima inaplazable la necesidad de que aporten 50.000 millones de dólares al año para ayudar a los más pobres del planeta a adaptarse a los efectos inevitables del cambio climático.Esta ONG señala que los impactos del cambio climático pueden ser catastróficos e irreversibles. En el año 2020, la ONU calcula que 250 millones de personas de África podrían carecer de agua y, en los próximos años, hasta 50 millones de personas podrían verse obligadas a abandonar sus hogares debido a condiciones climáticas extremas, como sequías, inundaciones, huracanes o la extensión de enfermedades.“Es necesario que los representantes de los 180 países que participan en la Convención de Bonn actúen de manera urgente frente al cambio climático, igual que lo están haciendo con la crisis financiera global en el encuentro del G20 de esta misma semana en Londres”, afirma el portavoz de Intermón Oxfam (Oxfam en España) para Cambio Climático. En opinión de Hernández de Toro la crisis económica global y la crisis climática están estrechamente unidas. “Un acuerdo internacional justo sobre clima puede estimular la economía y crear millones de puestos de trabajo “verdes”, proteger los bosques y promover una recuperación económica sostenible”, apunta el portavoz de Intermón Oxfam (Oxfam en España).
Al margen de la realidad política, los impactos del cambio climático -en especial sobre los más pobres- deben ser prioritarios
José A. Hernández de Toro
Portavoz para Cambio Climático, Intermón Oxfam (Oxfam Internacional en España)