Aproximadamente un 40% de la población de Sudán del Sur padecerá hambre aguda a finales de julio, según revelan los datos del último análisis de la situación alimentaria en el país africano. Esta es la mayor cifra jamás registrada.
Ante esta alarmante situación, el director de país de Oxfam para Sudán del Sur, Zlatko Gegic, ha declarado:
“El número de personas que pasan hambre en Sudán del Sur ya es escalofriante, y se espera que aumente en unas 800.000 personas más, ya que los combates impiden que muchos reciban la ayuda que necesitan urgentemente.
El miedo y los combates están obligando a la población a abandonar sus hogares, de modo que no pueden cultivar los campos y alimentar a sus familias. Muchas personas no pueden comer cada día y se están viendo obligadas a vender lo poco que tienen para conseguir alimentos.
La población de Sudán del Sur necesita desesperadamente que esta guerra se acabe para poder acceder a alimentos y recibir ayuda humanitaria vital. Hacemos un llamamiento enérgico a todas las partes implicadas en el conflicto para que permitan a la población recibir ayuda humanitaria con seguridad.
Sudán del Sur ha entrado en una espiral de caída libre económica. La población se debe enfrentar a unos precios de los alimentos extremadamente altos y a un constante aumento del coste de la vida., La única manera de abordar esta crisis económica es parar la guerra, asegurar una paz duradera y empezar a reconstruir la economía.
La ayuda humanitaria está funcionando; el informe muestra que de no ser por la ayuda humanitaria, la situación de quince zonas del país se habría clasificado como “emergencia” alimentaria. Sin embargo, los combates y la estación de las lluvias, que está a punto de empezar, harán más difícil para las personas acceder a la ayuda que salva vidas, y empeorarán una crisis alimentaria ya de por sí espantosa.”
Gegic añadió que la difusión del informe a tiempo ha sido fundamental para elaborar programas y planificar.
“El llamamiento de la ONU para la respuesta en Sudán del Sur solo ha recibido hasta ahora el 35% de la financiación que precisa. Los donantes deberían incrementar urgentemente los fondos asignados y asegurarse de que el dinero llega rápidamente para permitir a los actores humanitarios salvar miles de vidas.”
Notas para editores
Conclusiones del informe Clasificación integrada de la seguridad alimentaria en fases (CIF):
- Aproximadamente dos tercios de la población se encuentra ahora en una situación de inseguridad alimentaria: unos 7,8 millones de personas se encuentran en las fases 2,3 y 4 de inseguridad alimentaria.
- Unos 3,8 millones de personas pasan actualmente hambre aguda, y se espera que su número aumente hasta los 4,6 millones para finales de julio, una cifra mayor de lo que se había estimado jamás y que representa el 40% de la población.
- 800.000 personas se encuentran en niveles de emergencia alimentaria, enfrentándose a una escasez de alimentos extrema y peligrosa. El análisis se realizó antes de la reciente escalada del conflicto, por lo que se espera que para miles de personas en Sudán del Sur el panorama sea aún peor que el descrito.
- Los niveles de malnutrición se han disparado y la población infantil de menos de cinco años, así como las mujeres embarazadas y las madres en lactancia, son las más afectadas, con posibilidad de enfermar o de morir. El 80% de las comarcas de Gran Alto Nilo, Warab y Bahr el-Ghazal del Norte se encuentran en un nivel crítico de malnutrición.
- Se espera que para septiembre, después de la primera gran cosecha de la temporada, el número de personas que padecen hambre extrema se reduzca en 2,8 millones.
- La mayoría de la población está recibiendo alguna forma de ayuda humanitaria alimentaria.
- La “temporada de escasez” tradicional, periodo durante el cual la población depende de los alimentos almacenados, comenzó dos meses antes de lo previsto en algunas de las zonas más afectadas.
Información de contacto
Faith Kasina, en Juba al +211 (0) 955 477 540
Conclusiones del informe Clasificación integrada de la seguridad alimentaria en fases (CIF):
- Aproximadamente dos tercios de la población se encuentra ahora en una situación de inseguridad alimentaria: unos 7,8 millones de personas se encuentran en las fases 2,3 y 4 de inseguridad alimentaria.
- Unos 3,8 millones de personas pasan actualmente hambre aguda, y se espera que su número aumente hasta los 4,6 millones para finales de julio, una cifra mayor de lo que se había estimado jamás y que representa el 40% de la población.
- 800.000 personas se encuentran en niveles de emergencia alimentaria, enfrentándose a una escasez de alimentos extrema y peligrosa. El análisis se realizó antes de la reciente escalada del conflicto, por lo que se espera que para miles de personas en Sudán del Sur el panorama sea aún peor que el descrito.
- Los niveles de malnutrición se han disparado y la población infantil de menos de cinco años, así como las mujeres embarazadas y las madres en lactancia, son las más afectadas, con posibilidad de enfermar o de morir. El 80% de las comarcas de Gran Alto Nilo, Warab y Bahr el-Ghazal del Norte se encuentran en un nivel crítico de malnutrición.
- Se espera que para septiembre, después de la primera gran cosecha de la temporada, el número de personas que padecen hambre extrema se reduzca en 2,8 millones.
- La mayoría de la población está recibiendo alguna forma de ayuda humanitaria alimentaria.
- La “temporada de escasez” tradicional, periodo durante el cual la población depende de los alimentos almacenados, comenzó dos meses antes de lo previsto en algunas de las zonas más afectadas.
Faith Kasina, en Juba al +211 (0) 955 477 540