CAN 2012 : a pesar del pitido final, aún queda por ganar el partido contra el hambre en el Sahel

Se estima que el número de personas que necesita asistencia en la región del Sahel aumenta hasta los 11 millones, por lo que Oxfam advierte de que debe reforzarse la labor humanitaria en las próximas semanas.   

La agencia humanitaria internacional ha elogiado a los futbolistas africanos por unirse al llamamiento a la comunidad internacional para que actúe rápidamente, con el fin de prevenir un empeoramiento de la crisis alimentaria que se avecina la zona.

Con motivo de la Copa Africana de Naciones, estrellas del fútbol de la talla de Moumouni Dagano de Burkina Faso, Demba Ba de Senegal, Seydou Keïta de Malí y Lawali Idrissa de Níger, entre otros,  se han unido a Oxfam para dar más visibilidad a la crisis alimentaria que amenaza la región de África del Oeste, conocida como el Sahel, y, con ello, apoyar la lucha contra el hambre en sus propios países y lograr  salvar vidas y los medios de subsistencia de millones de africanos.   

En un contexto en el que, según  las estimaciones oficiales, el número de personas que necesitará asistencia en los próximos seis meses se acerca a los 11 millones y los recursos necesarios con los que poder dar una respuesta ascienden a 700 millones de euros, Oxfam advierte de que la acción de la comunidad internacional en la región deberá incrementarse.  

Al Hassan Cissé, asesor de Políticas de Seguridad Alimentaria de Oxfam en África del Oeste, ha afirmado: “La potencial dimensión de la crisis que se avecina en el Sahel ya la conocemos, por lo que es ahora el momento de movilizar los recursos para proteger la vida y el sustento de millones de personas y proteger a los niños de la desnutrición. Cada mes de retraso se traducirá en un empeoramiento de la situación para las comunidades más vulnerables y conllevará el aumento del coste de la respuesta. Aunque apreciamos señales alentadoras de algunos donantes aportando ya fondos, se necesita mucha más ayuda si actuamos acorde con la dimensión y la velocidad requeridas  para evitar lo peor”.

La semana pasada la Comisión Europea aumentó su aportación para ayuda humanitaria en la región a 123,5 millones de euros y Alemania anunció un nuevo apoyo de 12 millones de euros, así como  Australia, con  8 millones de euros. Otras promesas de ayuda, también aplaudidas por Oxfam, han sido anunciadas por países como Francia y Reino Unido, con 17 y 8 millones de euros, respectivamente.

Oxfam está proporcionando agua y saneamiento, así como un apoyo esencial para proteger los medios de vida de las comunidades afectadas por la situación en todo el Sahel, incluyendo a los refugiados de Malí en Níger que han huido del conflicto en su país durante la semana pasada.

Cuando la Copa Africana de Naciones ha llegado a su final y la situación en la región amenaza con empeorar, los futbolistas siguen manifestando su apoyo para ganar el partido  contra la hambre. Demba Ba jugador del equipo senegalés, y del equipo de Newcastle United, ha señalado: "Es nuestro deber  comprometernos para garantizar que el hambre no sea una opción en el siglo XXI. Todos nosotros tenemos que actuar con determinación y coraje para defender a nuestros hermanos y hermanas a lo largo y ancho del Sahel”.

La crisis que se avecina en esta zona africana se debe principalmente a las bajas precipitaciones, que provocaron una caída del 25% en la producción de cereales en la última cosecha, así como a la subida del precio de los alimentos, que ha sido de hasta un 90 por ciento si se compara con el promedio de los últimos cinco años.

El Sahel es una región crónicamente vulnerable a las amenazas externas, como la sequía. Ante este contexto, Oxfam demanda inversiones a largo plazo para incrementar la resiliencia de las comunidades para que puedan hacer frente a las malas temporadas, con el fin de prevenir futuras crisis.

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