Impacto de la crisis en África
Emma Seery: “Con una crisis económica que le costará a África 245.000 millones de dólares solo en este año, nos encontramos en un estado de emergencia. Pero dónde está el plan de emergencia del G8 para los 25.000 millones que ha prometido?
“La discusión sobre África se delegó a una insultante reunión simbólica. ¿Cómo podemos tomar al G8 en serio cuando lo único que ofrecen a África son promesas rotas y oportunidades para salir en una foto”.
Alimentación
Gawain Kripke: “Oxfam celebra que el comunicado conjunto de los líderes del G8 se centre en el hambre y las necesidades de los pequeños agricultores. El único rayo de luz de toda la cumbre ha sido el compromiso de dedicar 20.000 millones de dólares a lo largo de tres años para el desarrollo de la agricultura, que es una cifra superior a la esperada”.
“El G8 y otros líderes comprometiendo 20.000 millones de dólares para asistencia a la agricultura. La mayor parte de este fondo es reciclado, pero el dinero fresco representa un pago inicial para eliminar el hambre. Con 1.000 millones de personas pasando hambre, será preciso destina más dinero a este fin".
Veredicto de la Cumbre
JJeremy Hobbs: “Para Obama fue un ‘Si, podemos’, para el G8 de Berlusconi es un ‘no queremos’".
“Esta cumbre ha sido un desastre. No hizo nada por África y el planeta sigue a fuego lento“.
"En la Roma Antigua el pueblo recibía pan y circo, pero todo lo que recibimos del G8 de Berlusconi fue circo”.
“Canadá 2010 es el final del camino para el G8. Todas las promesas que han hecho están aún por cumplirse. Tienen tan solo 12 meses para evitar ser recordados como los que dejaron morir a los más pobre y al planeta”.
“Con el límite de los 2º centígrados, el G8 acordó que el agua de la inundación climática no debe llegar al techo. Pero no han hecho nada respecto al agua que se nos arremolina alrededor del cuello”.
“El G8 debe tomar acciones urgentes para contrarrestar y hacer frente al caos climático. Esto significa que los países industrializados deben reducir sus emisiones en un 40% por debajo de los niveles de 1990, y hacerlo en 2020. También deben destinar, al menos, 150.000 millones de dólares anuales para que los países en desarrollo puedan adaptarse a los efectos del cambio climático y reducir sus emisiones”.
“El G8 se van hoy con una enorme agenda inconclusa. Millones de niños no tienen acceso a la escuela, millones más mueran por enfermedades curables. Esto es vergonzoso y los canadienses deben moverse rápido para solucionarlo. No habrá una segunda oportunidad“.