Las negociaciones sobre comercio de armas son claves para evitar masacres como la de Siria en el futuro

Es hora de acabar con el enfoque de "bolsa de cadáveres" en materia de control de armas e impulsar un Tratado de Comercio de Armas vinculante

Los líderes políticos tienen hoy una oportunidad histórica para situar los derechos humanos y los objetivos humanitarios por encima del interés y beneficio personales cuando se inicien las negociaciones para regular el comercio mundial de armas en la sede de Naciones Unidas, han afirmado activistas de todo el mundo.

La coalición Armas bajo control, que incluye a Amnistía Internacional, Oxfam y organizaciones de más de 125 países, pide a los gobiernos que aprueben un tratado con normas estrictas que protejan los derechos humanos y el derecho internacional humanitario.

De media, cada minuto muere una persona como consecuencia de la violencia armada, que además deja a miles heridas y maltratadas cada día.

Objetivo: evitar más víctimas

"En los casos de Siria y la región de los Grandes Lagos de África, el mundo atestigua una vez más el horrendo costo en vidas y sufrimiento humano del temerario y secretísimo comercio de armas. ¿Por qué deben morir millones de personas más y muchas otras vidas quedar devastadas antes de que los líderes abran los ojos y tomen medidas decisivas para controlar adecuadamente las transferencias internacionales de armas?" se ha preguntado Brian Wood, coordinador de Control de armamentos y Derechos Humanos de Amnistía Internacional.

"Las negociaciones del Tratado de Comercio de Armas son una prueba de fuego para los líderes políticos, que deben hacer frente a la realidad y aprobar reglas que pongan fin a las transferencias irresponsables de armas que dan lugar a graves abusos de los derechos humanos", ha concluido Wood.

Si no se logra firmar un Tratado Comercio de Armas (TCA) integral, muchos millones de civiles más serán asesinados, heridos, violados y obligados a huir de sus hogares como resultado directo del comercio de armas irresponsable y mal regulado.

Durante décadas, gente de todas las regiones ha sufragado el costo de más de 60.000 millones de dólares del comercio de armas, que también atiza conflictos armados, violencia y corrupción, y debilita gravemente el avance hacia el desarrollo.

Oportunidad única para crear un Tratado realmente vinculante

Anna MacDonald, coordinadora para Oxfam de la campaña Armas bajo Control, ha expresado que "solo una vez en cada generación tenemos la oportunidad de hacer del mundo un lugar realmente más seguro. Este no es un simple tratado, sino uno que puede poner freno a un comercio que en este momento está fuera de control".

"Desde el Congo hasta Libia, desde Siria hasta Malí, todos han sufrido por causa del comercio no regulado de armas y municiones que permite que esos conflictos causen sufrimientos inconmensurables durante demasiado tiempo. En las próximas semanas, los diplomáticos cambiarán el mundo o decepcionarán." ha agregado MacDonald.

En la actualidad no existen normas internacionales jurídicamente vinculantes que regulen el comercio de armas convencionales, y son frecuentes las deficiencias y lagunas en los controles nacionales y regionales.

Los activistas de todo el mundo están decididos a hacer que los gobiernos pongan fin al enfoque de "bolsa de cadáveres" que, en algunos casos, conduce a que el Consejo de Seguridad de la ONU imponga embargos de armas pero, incluso entonces, solo después de que el temerario comercio de armas ha dado lugar a una catástrofe.  

En lugar de esto, lo que se necesita con urgencia es un TCA que impida las transferencias de armas que acrecientan los abusos contra los derechos humanos, la pobreza y los conflictos.

El tratado debe incluir todo tipo de armas y municiones

Para que el TCA sea eficaz, debe regular la venta y transferencia de todas las armas, municiones y equipo conexo usado en actividades militares y operaciones de seguridad interna: desde vehículos blindados, misiles y aviones hasta armas pequeñas, granadas y municiones.

Se debe exigir a los gobiernos que realicen rigurosas evaluaciones de riesgos antes de autorizar una transferencia o transacción internacional de armas, y que informen públicamente sobre todas las autorizaciones y envíos. La negociación sin permiso o el desvío ilegal de armas debe tipificarse como crimen u otro tipo de delito en las leyes nacionales.

Aquellos que no cumplan con las obligaciones del tratado deben rendir cuentas.

Por su parte, Jeff Abramson, director del secretariado de Armas bajo control, ha mostrado su pesar al afirmar que "es una realidad absurda y letal que en la actualidad existan normas mundiales que regulan el comercio de frutas y huesos de dinosaurio, pero no haya reglas que regulen el comercio de armas de fuego y tanques de guerra".

"Activistas de todo el mundo están alzando la voz en los medios de comunicación y se están movilizando para que los gobiernos y los ministros negocien un Tratado de Comercio de Armas que salve vidas con una combinación de políticas firmes y repercusión directa sobre el terreno", ha concluido Abramson.

Amnistía Internacional ha puesto de relieve el modo en que los "seis grandes" proveedores de armas del mundo —China, Francia, Alemania, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos— suministran grandes cantidades de armas a gobiernos represivos en todo el mundo, a pesar del riesgo considerable de que las armas sean utilizadas para cometer graves violaciones de los derechos humanos. Esto incluye suministros de armas de EE. UU. a Egipto y Bahrein.

Oxfam publicó recientemente investigaciones que muestran el impacto global anual que tiene el comercio de 4 mil millones de dólares en municiones en la gente más pobre del mundo, especialmente aquellos que viven en situaciones de conflicto o en estados frágiles, como Afganistán y Somalia.  

Menos de un mes para crear el tratado

La mayoría de los gobiernos quiere que para el 27 de julio se haya aprobado un tratado con un texto fuerte, pero algunos tratan de debilitar las normas y definiciones del tratado. Recientemente, Estados Unidos, China, Siria y Egipto han expresado su oposición a incluir municiones. China quiere excluir las armas pequeñas y las "donaciones", en tanto que varios gobiernos de Oriente Medio se oponen a que se incluyan criterios de derechos humanos en el tratado.

Gente de todo el mundo irá aumentando la presión sobre sus dirigentes para que aprueben un TCA en las próximas semanas, en las negociaciones que se prevé que concluyan a finales de julio.

Más información

Descárgate el informe: La cuenta atrás. Una oportunidad histórica para conseguir un Tratado sobre el Comercio de Armas que salve vidas

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