- Las personas refugiadas pagan el precio de la falta de voluntad política y la xenofobia en alza
- España ha acogido sólo un 4% del total de sirios y sirias que prometió recibir
Oxfam ha publicado hoy un nuevo informe en el que denuncia que de los casi cinco millones de ciudadanas y ciudadanos sirios refugiados en países vecinos, menos del 3% ha sido reasentado en países ricos. Por el contrario, en muchos países la falta de voluntad política y el aumento de la xenofobia han provocado una reacción negativa contra la población refugiada que huye de la guerra y la violencia.
Oxfam ha revisado las políticas de reasentamiento de ocho países (Alemania, Australia, Canadá, España, Estados Unidos, Países Bajos, Reino Unido y Rusia) y ha concluido que en algunos países los largos procesos, los controles de seguridad y un clima político cada vez más hostil han retrasado la acogida de refugiados sirios. En otros países, sin embargo, se ha registrado un aumento de la voluntad política y de los recursos humanos y financieros, lo que ha favorecido el reasentamiento.
España se comprometió en marzo de 2016 a reasentar a 1.449 personas sirias refugiadas en dos años, pero en nueve meses sólo han llegado 289, es decir, el 20%, todas desde Turquía y Líbano. El Gobierno español tiene que facilitar los medios para acelerar el proceso y mostrar voluntad política. La cuota “justa” de personas refugiadas que España debería reasentar es de 16.031, según cálculos de Oxfam basados en la riqueza del país.
Es más, si tenemos en cuenta las dos vías principales para acoger refugiados sirios (reasentamiento y reubicación), los datos son aún peores: el Gobierno se ha comprometido a recibir a 17.387 personas refugiadas, pero hasta ahora sólo 687 han llegado a nuestro país, o sea, el 4%.
Además, Oxfam denuncia que desde España no se promueven vías seguras para que quienes huyen de la guerra y la persecución no tengan que jugarse la vida. Por un lado, nuestro país tiene criterios restrictivos para la reunificación familiar. Por otro, España ha desatendido la petición hecha en septiembre de 2015 por ACNUR, que solicitó a nuestro gobierno que facilitara visas a 500 estudiantes sirios. El Gobierno ha concedido sólo 10 visas y becas para universidades españolas, todas para estudiantes que ya estaban en nuestro país. España, por último, carece de un programa de admisión humanitaria, y ha recortado su ayuda humanitaria un 70% desde 2011.
Canadá, un ejemplo a seguir
La acogida es muy variable según los países. El pasado año, Canadá reasentó a cerca de 35.000 refugiados sirios, mientras que el Reino Unido apenas reasentó a 3.000. Si tenemos en cuenta el tamaño de la economía de cada país, esto significa que, desde el comienzo del conflicto sirio, Canadá ha recibido al 248% de la población refugiada que es capaz de acoger, mientras el Reino Unido apenas al 18%.
Jordania, Líbano y Turquía acogen a la gran mayoría de los cerca de cinco millones de personas sirias registradas como refugiadas y, junto con Irak y Egipto, han afrontado la crisis de refugiados con apenas apoyo financiero de otros Estados. En diciembre de 2016, el llamamiento humanitario para la crisis de refugiados sirios apenas ha recibido la mitad de los fondos solicitados.
Oxfam insta a la comunidad internacional a compartir de forma más equitativa la responsabilidad hacia la población refugiada, ofreciendo reasentamiento u otras formas de admisión humanitaria al menos al 10% más vulnerable de los refugiados sirios para finales de 2017, y a proseguir con otras vías de admisión como la reunificación familiar y las visas de estudiante.
Algunos países ricos deben mejorar los procesos para acoger refugiados en situación de vulnerabilidad y aprender de aquellas naciones que lideran la respuesta a esta crisis, además de combatir el miedo y los discursos políticos negativos –y en su mayor parte falsos– acerca de los refugiados.
Por ejemplo, en Países Bajos el proceso para reasentar a una persona refugiada lleva una media de seis meses, mientras que en otros países puede durar incluso hasta cinco años. Canadá ha desplegado a 500 trabajadores adicionales en sus embajadas en los países vecinos a Siria para acelerar los procesos de reasentamiento. Por su parte, Estados Unidos también ha enviado más personal y recursos a la región y, sin embargo, tan solo ha reasentado al 10% de los refugiados que le corresponderían.
Notas para editores
Informe completo en inglés: http://oxf.am/ZL3G Resumen en español. http://oxf.am/ZL3g
El reasentamiento es una opción por la que un tercer país (distinto del país de donde ha huido la persona refugiada o del país en el que primero buscó asilo o donde reside) ofrece a una persona la condición de refugiada.
La reubicación consiste en transferir a las personas solicitantes de asilo de un Estado miembro de la Unión Europea a otro, una vez que ya han llegado a suelo europeo por sus propios medios. Se trata de un proceso "intracomunitario" por el que los Estados miembro acuerdan asumir la gestión de algunos procesos de asilo iniciados en otros Estados miembro que estén recibiendo un gran número de solicitantes de asilo en su territorio.
Los programas de admisión humanitaria funcionan de forma similar, pero normalmente llevan implícitos procesos agilizados (que generalmente no implican la participación de ACNUR) y pueden ofrecer permisos de estancia permanente o temporal según la legislación o las políticas del país que ofrezca esta opción.
Inicialmente, Oxfam hizo un llamamiento a los países ricos a comprometerse de forma colectiva a proporcionar refugio a través de procesos de reasentamiento u otras formas de admisión humanitaria a al menos el 10% de la población refugiada registrada para finales de 2016. Este porcentaje corresponde al número de refugiados que según ACNUR se encuentran en situación de vulnerabilidad. Oxfam ha calculado el porcentaje de la población refugiada al que cada país le correspondería acoger conforme al tamaño de su economía.
Información de contacto
Joelle Bassoul jbassoul@oxfam.org.uk +961-71525218
Informe completo en inglés: http://oxf.am/ZL3G Resumen en español. http://oxf.am/ZL3g
El reasentamiento es una opción por la que un tercer país (distinto del país de donde ha huido la persona refugiada o del país en el que primero buscó asilo o donde reside) ofrece a una persona la condición de refugiada.
La reubicación consiste en transferir a las personas solicitantes de asilo de un Estado miembro de la Unión Europea a otro, una vez que ya han llegado a suelo europeo por sus propios medios. Se trata de un proceso "intracomunitario" por el que los Estados miembro acuerdan asumir la gestión de algunos procesos de asilo iniciados en otros Estados miembro que estén recibiendo un gran número de solicitantes de asilo en su territorio.
Los programas de admisión humanitaria funcionan de forma similar, pero normalmente llevan implícitos procesos agilizados (que generalmente no implican la participación de ACNUR) y pueden ofrecer permisos de estancia permanente o temporal según la legislación o las políticas del país que ofrezca esta opción.
Inicialmente, Oxfam hizo un llamamiento a los países ricos a comprometerse de forma colectiva a proporcionar refugio a través de procesos de reasentamiento u otras formas de admisión humanitaria a al menos el 10% de la población refugiada registrada para finales de 2016. Este porcentaje corresponde al número de refugiados que según ACNUR se encuentran en situación de vulnerabilidad. Oxfam ha calculado el porcentaje de la población refugiada al que cada país le correspondería acoger conforme al tamaño de su economía.
Joelle Bassoul jbassoul@oxfam.org.uk +961-71525218