Oxfam prepara el envío de mantas y material impermeable como parte del paquete de ayuda de 260 mil dólares para el área devastada por el terremoto del condado de Yushu, al sudeste de la provincia de Qinghai, al noroeste de China.
Los suministros se enviarán de las existencias de Oxfam en los almacenes de la cercana Chengdu, en la provincia de Sichuan, y de Lanzhou en la provincia de Gansu. La agencia cuenta con oficinas en ambas ciudades. Qinghai limita con Sichuan y Gansu, y el epicentro tuvo lugar cerca de la frontera sudeste.
Oxfam está en contacto con la administración local de Qinghai y las organizaciones no gubernamentales que valoran cuál es la mejor forma de ayudar.
“El frío supone un gran desafío para los supervivientes del terremoto, muchos de los cuales son pobres. Las temperaturas durante la noche descienden hasta cero grados Celsius. Oxfam planea distribuir mantas gruesas y telas impermeables a quienes hayan sufrido daños o perdido sus hogares debido al terremoto”, declaró John Sayer, Director General de Oxfam Hong Kong.
Un terremoto de una magnitud de 7,1 golpeó al condado de Yushu en la provincia sudeste de Qinghai el miércoles 14 de abril a las 07.49 de la mañana, hora local, seguido de una serie de réplicas. Los informes oficiales indicaron que había 617 muertos, 9110 heridos y 313 desaparecidos. El terremoto se cebó con 15 mil edificios residenciales en los que vivían alrededor de 100 mil personas, la mayoría pobres, dejándolas sin hogar.
Oxfam ya ha brindado asistencia a los habitantes de Qinghai durante las masivas tormentas de nieve de 1997 y nuevamente en 2008.