Tras una grave sequía y ante la llegada del duro invierno, Oxfam y Save the Children advierten que más de dos millones de personas en Afganistán podrían estar en situación de hambre extrema y abandono si no llega la ayuda necesaria.
Las agencias piden doblar los esfuerzos en la ayuda para llegar a las personas necesitadas antes de la llegada de fuertes nevadas que impedirán el acceso a muchas regiones del país.
A esta preocupante situación se añade que las escasas lluvias de este año han afectado a 14 regiones del país cuyas familias no han podido cultivar trigo suficiente para alimentarse durante el invierno.
De acuerdo con una evaluación de Naciones Unidas, en algunas provincias casi el 100 por ciento de la cosecha ha sido destruida y los precios de los alimentos se han disparado. En algunas áreas el precio del trigo se duplicado respecto a la misma fecha del año pasado. La crudeza del clima afgano puede comportar que las personas que viven en las zonas montañosas, casi la mitad de la población afectada, no pueda recibir la ayuda necesaria con la llegada del invierno.
La situación empeora
Las familias están haciendo frente a esta situación reduciendo sus raciones de comida, pidiendo dinero prestado e incluso desplazándose a los países vecinos, Irán o Pakistán. Un 90 por ciento de la población de la zona afectada vive endeudada después de haber pedido préstamos para comprar comida. Muchas escuelas han cerrado y los niños han empezado a trabajar.
Las agencias han explicado que la disponibilidad de alimentos, agua potable y atención médica adicionales será crucial en las próximas semanas ya que las familias se enfrentan al riesgo de aumento de enfermedades y la malnutrición, que afectarán a los más pobres y vulnerables.
La entrega de esta ayuda se ha hecho difícil con las primeras nevadas en algunas partes de Afganistán, complicando el acceso a las zonas más afectadas por la sequía. Las agencias temen que a medida que el invierno avance el número de personas en situación de riesgo se incrementará drásticamente.
El director de Oxfam en Afganistán, Manohar Shenoy, señala que "tenemos poco tiempo para poder ofrecer a las comunidades la ayuda que necesitan desesperadamente antes de que llegue el duro invierno, que hará inaccesibles muchas zonas. La nieve ha empezado a caer y las regiones montañosas quedarán aisladas en unas semanas. Los afganos, acostumbrados a condiciones difíciles, nos han contado que este año la sequía lo ha destruido todo. Sus reservas de alimentos son escasas y están preocupados por cómo van a sobrevivir los próximos meses.”
David Skinner, el director de Save the Children en Afganistán, explica que "las familias se enfrentan a quedar aisladas durante el invierno sin suficientes alimentos y agua potable. Sabemos que los niños están pasando hambre, que ya sufren un alto nivel de desnutrición, si la ayuda no se intensifica, muchos podrían morir porque no tienen suficiente para comer."
Las agencias han respondido a la sequía con proyectos de dinero efectivo por trabajo, y se está almacenando la ayuda en previsión de un deterioro de la situación humanitaria, así como trabajando con la gente local para preparase mejor para futuras sequías y otras emergencias.
Más información
CRECE - La campaña de Oxfam por un mundo sin hambre
Notas para editores
La sequía está afectando a 14 de las 34 provincias de Afganistán, principalmente en el norte, noreste y oeste del país
Información de contacto
En Oxfam: Maria Herranz Gete 91 204 67 20 / 615359401
mherranz@intermonoxfam.org
En Save the Children, Andrew Wander, a.wander@savethechildren.org.uk, +44 207 324 4959 or +44 7827 369 757.
La sequía está afectando a 14 de las 34 provincias de Afganistán, principalmente en el norte, noreste y oeste del país
En Oxfam: Maria Herranz Gete 91 204 67 20 / 615359401
mherranz@intermonoxfam.org
En Save the Children, Andrew Wander, a.wander@savethechildren.org.uk, +44 207 324 4959 or +44 7827 369 757.