A un año de la muerte de Alan Kurdi, el número de refugiados y migrantes muertos aumenta un veinte por ciento

El número de refugiados y migrantes fallecidos en todo el mundo tratando de huir a otro país ha aumentado un 20 % en los últimos 12 meses, a pesar de la indignación que suscitó la muerte de Alan Kurdi, el niño sirio de tres años que se ahogó el 2 de septiembre de 2015 en el Mediterráneo cuando su familia trataba de llegar a Europa desde Turquía.

Desde que se encontró el cuerpo del pequeño Alan en la playa, 5.700 personas han perdido la vida en las diferentes rutas que refugiados y migrantes utilizan en todo el mundo. En el año anterior a la muerte de Alan Kurdi, se registraron 4.664 muertes. El número de personas que han muerto en lo que va de año equivale a casi una persona cada 80 minutos. 

Hace un año, las fotografías de Alan Kurdi ocuparon las portadas de la prensa internacional. Visual Social Media Lab, con sede en la Universidad de Sheffield (Reino Unido), ha llevado a cabo una investigación independiente, que ha compartido con Oxfam, en la que ha concluido que, tras la muerte de Alan Kurdi, Twitter registró un aumento del interés por la crisis migratoria, con cuatro veces más tuits relacionados que durante todo el año anterior. La etiqueta #RefugeesWelcome ("Refugiados bienvenidos", en su traducción en español) se convirtió en trending topic a nivel mundial durante los días posteriores a la muerte de Alan Kurdi y se ha utilizado 2,35 millones de veces durante los doce meses siguientes. 

Las recientes imágenes de Omran Daqneesh, un pequeño sirio fotografiado cubierto de sangre y polvo tras haber sido rescatado de entre los escombros del edificio en el que vivía en Alepo, ha tenido un efecto similar demostrando, una vez más, la gran preocupación de la opinión pública por la violencia que obliga a tantas personas a huir. 

A finales de este mes tendrán lugar en Nueva York dos importantes eventos sobre la crisis migratoria: la Reunión de Alto Nivel de la ONU sobre Refugiados y Migrantes y la Cumbre de Líderes sobre los Refugiados. Sin embargo, las negociaciones que se han llevado a cabo de cara a la reunión de alto nivel de las Naciones Unidas han sido decepcionantes, pues muchos países se han mostrado reacios a incrementar sus esfuerzos de ayuda. 

Oxfam hace un llamamiento a los Gobiernos, especialmente a los más ricos, a que se comprometan a acoger a más refugiados, a proporcionar ayuda a los países más pobres que dan cobijo a la mayor parte de la población refugiada y a proteger a todas las personas obligadas a desplazarse.

Winnie Byanyima, directora ejecutiva de Oxfam Internacional, ha afirmado: "Cuando vimos las fotografías de Alan Kurdi ahogado en la playa, todo el mundo condenó y lloró su muerte. Un año después, la situación no ha mejorado para las personas que, como Alan, buscan protección y dignidad”.

"Las Naciones Unidas y el presidente Obama, que consideran la crisis migratoria un asunto de suma gravedad, han organizado dos cumbres paralelas. Sin embargo, los progresos en las recientes negociaciones previas a la reunión de alto nivel de las Naciones Unidas han sido vergonzosamente escasos. Los países se han centrado en sus propios intereses mientras cada vez más personas seguían perdiendo la vida en rutas cada vez más peligrosas”. 

"Los Gobiernos no tienen una, sino dos oportunidades para ayudar: la primera, durante la reunión de alto nivel sobre migración de las Naciones Unidas y, la segunda, en la cumbre organizada por el presidente Obama. Los líderes mundiales no pueden dejar pasar estas oportunidades cuando hay tantas vidas en juego". 

Francesco D'Orazio, cofundador de la empresa de análisis de audiencias Pulsar y miembro fundador de Visual Social Media Lab, ha señalado: "Nuestro análisis demuestra que se produjo un enorme aumento del interés por la crisis de refugiados tras la muerte de Alan Kurdi. Ahora, más personas buscan información y noticias y debaten sobre estas cuestiones en las redes sociales”. 

La mayoría de las muertes registradas por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) son de personas ahogadas en el Mediterráneo. Pero muchas otras personas también han muerto tratando de atravesar el Sáhara, o se han ahogado intentando cruzar la bahía de Bengala o el mar de Andamán, o mientras viajaban sobre los techos de los trenes en México.

Oxfam hace un llamamiento a la acción a través de su campaña Derecho a Refugio para acoger a más refugiados, evitar la separación de familias y proteger a las personas que huyen de sus hogares.