“Ahora queremos ir más allá de la calidad de nuestro trabajo para recibir feedback acerca del comportamiento de nuestro equipo y de las organizaciones socias.”
Me llamo Rosa Sala y soy la directora de Operaciones Programáticas de Oxfam Internacional. Trabajamos en 67 países de siete regiones y contamos con más de 3.500 organizaciones socias, así que cuando hablamos de cambiar nuestro trabajo, hablamos de cambiar el trabajo de una confederación muy diversa con diferentes culturas, legislaciones y lenguas.
En algunos lugares, el trabajo de Oxfam es muy práctico, especialmente en Estados frágiles y durante las respuestas humanitarias. Nuestro Equipo Humanitario Global (GHT, por sus siglas en inglés) siempre ha dado la máxima prioridad a la seguridad en los programas. Con esto queremos decir que las respuestas humanitarias de Oxfam deben incluir medidas proactivas que garanticen que no dañamos sin darnos cuenta a las personas, ni socavamos los valores en los que se sustenta nuestro trabajo.
El año pasado, invertimos recursos adicionales para mejorar nuestra capacidad de prevención y salvaguardia dentro del GHT, por ejemplo, a través del personal de Apoyo Humanitario para Prevención y Salvaguardia a tiempo completo, como Ceri Cockram, cuyas experiencias en Mozambique y Etiopía se incluyen en este documento. El GHT ha mejorado su enfoque para el desarrollo de programas seguros introduciendo nuevos paquetes de herramientas y formaciones, así como fondos extra en algunos países en los que se ejecutan programas, con el objetivo de probar y difundir todos estos nuevos mecanismos.
También estamos adaptando estas prácticas y herramientas a nuestro trabajo de desarrollo a largo plazo, tanto cuando Oxfam está implementando directamente su trabajo en las comunidades, como en nuestras asociaciones con otras organizaciones. Nuestras organizaciones socias abarcan tanto pequeños grupos de base como organizaciones mucho más grandes, mayores incluso que Oxfam. Aprendemos e intercambiamos conocimientos con todas ellas. Encontrarán más información en el texto sobre Timor Leste de Kathy Richards.
Oxfam ya cuenta con procedimientos de denuncia claros dentro de las comunidades donde trabajamos. Sin embargo, ahora queremos ir más allá de la calidad de nuestro trabajo (es decir, que "está Oxfam ayudando a marcar una diferencia positiva") para recibir feedback acerca del comportamiento de nuestro equipo y de las organizaciones socias, lo que incluye las posibles quejas por explotación y abusos. Esto constituye una parte fundamental de nuestro enfoque para el desarrollo de programas seguros, el cual debe promover la rendición de cuentas ante las comunidades para las que trabajamos.
Asimismo, desde Oxfam estamos trabajando con nuestras organizaciones socias para impulsar este enfoque para el desarrollo de programas seguros y responsables, a través, por ejemplo, del establecimiento de unos estándares mínimos, del desarrollo de capacidades y de evaluaciones de riesgos que incluyan la explotación y los abusos sexuales, así como los abusos a menores.
Para promover la prevención y salvaguardia en nuestros programas, hemos aumentado nuestra capacidad al respecto creando puestos de asesoramiento regionales en materia de prevención y salvaguardia. También planeamos seleccionar y contratar a oficiales de Prevención y Salvaguardia a tiempo completo en una serie de países de alto riesgo.
Asimismo, el Fondo de Integridad de Oxfam ya se encuentra operativo y a disposición de todo el equipo y las organizaciones socias que lo necesiten para formarse y desarrollar sus capacidades en materia de prevención y salvaguardia, así como para hacer frente a otras cuestiones relacionadas con vivir conforme a nuestros valores, la gestión financiera, los conflictos de intereses, los abusos de poder y la corrupción. Actualmente estamos tomando medidas para ampliar este fondo, por ejemplo, integrando la prevención y salvaguardia en las propuestas que hacemos regularmente a los donantes.
Además, ahora estamos elaborando el plan y presupuesto general de Oxfam para el periodo 2020-2021. Esto nos brinda la oportunidad de revisar cada uno de los 67 informes de país e identificar déficits de recursos y planes de acción de prevención y salvaguardia. Nos valdremos de este proceso para tomar decisiones acerca de qué podemos conseguir gracias a los equipos centrales y regionales. También aprovecharemos para investigar si es posible crear sinergias entre países para conseguir resultados conjuntos.