Ante la resolución emitida ayer por la Corte Suprema de Paraguay, Oxfam celebra la liberación de los once campesinos condenados de forma injusta y reconoce el esfuerzo de la ciudadanía activa organizada, que sostiene desde hace 6 años el pedido de esclarecimiento de la masacre ocurrida en Curuguaty en junio de 2012, durante un desalojo violento contra las familias campesinas sin tierra.
La suma final a favor de la petición al Presidente de Paraguay llegó a 37.574 firmas, informaron referentes de la campaña internacional “Jóvenes sin tierra = Tierra sin futuro”.
Paraguay es el cuarto exportador de soja del mundo. Seducido por las ganancias que deja su venta, el país dedica a ese grano casi la totalidad de su territorio cultivable.