La organización asegura que un cambio positivo en el país es posible pero que debe haber voluntad política en Kabul y apoyo a largo plazo de la comunidad internacional.
Las Islas Salomón se enfrentan a la violencia étnica, la fragilidad de las instituciones estatales, la corrupción y el aumento de las tasas de criminalidad que han afectado gravemente al desarrollo del país.