Factores como un gasto demasiado bajo en los sistemas públicos de salud, la fragilidad de las redes de seguridad social y unos derechos laborales insuficientes hacen que la mayoría de los países del mundo carezcan de los recursos necesarios para hacer frente a la pandemia de COVID-19, según un análisis de Oxfam y Development Finance International (DFI, Financiación Internacional del Desarrollo).
La comunidad internacional ha cometido un fallo catastrófico al intentar alcanzar el alto el fuego mundial necesario para que los países en conflicto (y el mundo en general) puedan detener la propagación del coronavirus y salvar millones de vidas, según alerta Oxfam.