Veredicto de Oxfam de la cumbre del G20

Sobre los sistemas fiscales

Los líderes del G20 se han comprometido a un acuerdo global para compartir información fiscal de forma automática y han establecido finales del 2015 como fecha límite para su implementación.

No han anunciado cuándo se sumarán a este acuerdo de intercambio automático de información los países en desarrollo, lo que significa que no está claro cuándo estos países se empezarán a beneficiar de este nuevo sistema.

El G20 aprobó el plan de acción de la OCDE para detener el intercambio de ganancias de las compañías transnacionales, pero no se comprometió en ninguna forma a que los países en desarrollo participen en el proceso de negociación de nuevas normas fiscales. 

Las naciones africanas pierden cerca del 2 por ciento de su PIB como resultado de prácticas de "facturación fraudulenta", que es un tipo de evasión fiscal. Esta enorme pérdida de dinero es equivalente a más de la mitad de la cantidad que gastan los gobiernos en materia de salud en el África subsahariana.

Carlos Zarco, de Oxfam afirma: "El G20 ha puesto su primer clavo en el ataúd de la evasión fiscal de las empresas, pero no han dado garantías de cómo y cuándo se detendrá la estafa a los países más pobres. Los países en desarrollo han tenido palabras cálidas de parte de los países más ricos antes; esta vez debe ser diferente. Ellos merecen una silla en la mesa donde se están reescribiendo las reglas tributarias porque la vida de sus pueblos es la que está en riesgo.

Sobre Siria

Carlos Zarco manifiesta: "Oxfam celebra el anuncio del aumento de la ayuda humanitaria para la respuesta a la crisis en Siria. Instamos a que estos fondos sean liberados inmediatamente. Con 2 millones de refugiados y 4 millones de personas desplazadas dentro de Siria, la ayuda se necesita desesperadamente para proporcionar la asistencia necesaria para salvar vidas.

"Dada la naturaleza cada vez más prolongada del conflicto en Siria, los países donantes del G20 también necesitan apoyar a largo plazo a los países vecinos de Siria, que acogen a un gran número de refugiados.
"Oxfam está profundamente decepcionado de que los líderes del G20 hayan desperdiciado esta oportunidad de avanzar hacia una solución política a la crisis en Siria. El sufrimiento humano causado por la crisis es asombroso. Más de 100.000 vidas se han perdido.

"En lugar de debatir la acción militar que sólo empeorará la situación, los líderes tienen que dejar de lado sus diferencias e intensificar los esfuerzos para detener el derramamiento de sangre, antes de que Siria sea destruida y la región se desestabilice aún más."

Sobre desigualdad

El G20 necesita tomar el liderazgo para reducir la desigualdad. Oxfam ha calculado que el ingreso de las cien personas más ricas del mundo sería suficiente para terminar hasta cuatro veces con la pobreza extrema.

Oxfam insiste en que el G20 registre la creciente brecha de desigualdad entre los más ricos y los más pobres, para lograr políticas públicas que eviten la evasión fiscal y para promover el incremento del gasto público en salud, educación y seguridad social.

Carlos Zarco, portavoz de Oxfam considera que: "los líderes han fallado completamente en confrontar el creciente problema de la desigualdad del ingreso. Mientras que las compañías y los individuos ricos engordan, las familias comunes luchan por sobrevivir. Si el G20 no enfrenta esta situación, fallará en definir la agenda económica que el mundo necesita".

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